jueves, 12 de julio de 2012

Mis Amigos los Libros

(Poesía ganadora del Primer Lugar del Concurso de Lírica Docente organizado por la Fundación Leonidas Ortega Moreira -2012 y Participante del XIII Festival de Artes al Aire Libre del Municipio de Guayaquil (FAAL))



Taciturno un huancavilca divagaba
Entre poemas, cuentos  y relatos,
Cuando de pronto, sin ningún alegato,
Fue secuestrado,  las palabras,
Y aunque fue perdiendo la razón,
No perdió su compostura
Y escribió  con voraz premura
 Versos mezclados sin compasión

Y yo que todavía pensaba
Que el Quijote   ya estaba completo
Que aquel hidalgo,   de audaz prestancia
de rancia figura y  dudoso  abolengo
de tantas aventuras que  conocí en mi infancia
a través de la lectura,  en noches  de sosiego
a diferencia del caballero, no perdí mi cordura
aumenté mi cultura,  yo  fui un aventurero.

Sin embargo conocí, años más tarde,
A un guaytambo apasionado
Por las letras y  las artes,
Que dijo,  haber olvidado
Unos capítulos del maestro  Cervantes
Y añadió,   aventuras aparte
Pincelazos  literatos
 al Quijote y su acompañante.

Si mis amigos los libros, hablaran
Más de una historia podrían contarme
Pues son ellos,  los que tienen la palabra
Y yo la imaginación:    interminable

Estuve en  otros planetas
Conocí otros mundos dispares
el principito me hizo maletas
Antoine de Saint,  los avatares
Volcanes, flores y tumbos
Vanidosos, bebedores y faroleros
Personajes de infinitos mundos
La Flor, los volcanes  y el cordero

Me enamoré tantas veces
Y otras tantas,   me desamoré
García Lorca,  tuvo la culpa
De aquella  casada infiel
Más cuando enjugué mis lágrimas
y oscuras golondrinas pude ver
Gustavo Adolfo Bécquer me contemplaba
Tupidas madreselvas, al caer.
Fui amigo de Platero y Jiménez,
al pueblo en su lomo, fui a dar,
y sus ojos purpurinos cual cristales
que hasta parecía,  querían llorar.
Más esas lágrimas fueron mías,
Al descubrir,  varias páginas al final
Que al cielo de animales,
Impostergablemente te ibas a marchar.

Y besé la boca de Florentina
Aquella mañana cristalina
Entre rosas, claveles y coral,
La  imaginaba tierna y femenina
Gracias a Rubén Darío,
Tendida sobre el Diván
  
Y casi muero  fusilado
Aquel recordado día
Cuando el coronel Buendía
Iba a ser sacrificado.
La soledad de 100 años
No es tiempo suficiente
Para vivir,  o morir
sin haber sido amado.
Gabriel García Márquez,  tuvo la culpa
y macondo su cómplice callado.

Si mis amigos los libros, lloraran
Cuantas nostalgias,  podrían contarme
Porque su tristeza, abunda en la palabra
Cuando la melancolía, quiere acompañarme


Y fui un poeta suicida
De una generación decapitada
Si mi madre me dio la vida
La vida me quitó a mi amada
Medardo Ángel Silva,
Con pluma de sangre escarchada,
Compuso  versos sin calma,
De un amor inexorable
Que me dejó, indeleblemente
el alma en los labios, pero con sangre
Porque cuando  de  nuestro amor
Tu contemples la llama extinguida,
Indeteniblemente mi primor ,
me arrancaré la  mi vida…..